El pasado lunes, en la ciudad de San Pedro, una atribulada mujer llegó a la seccional 35º a fin de realizar formal denuncia en contra de un profesor de educación física que habría acosado a una alumna de quinto grado de una escuela local.
La mujer relató la circunstancia que la llevó a denunciar, comenzando por haber notado a su hija un poco rara cuando la fue a buscar a la escuela.
Luego, al llegar a la casa y cuando terminaban de tomar la merienda, la hija le dijo “si podía hablar a solas con ella”, a lo que accedió. Se fueron juntas a la habitación de la niñay allí, con lágrimas en los ojos y confesando vergüenza, le comentó que “cuando estaba saliendo del grado, junto a una compañera, la agarró de sorpresa el profesor de educación física, le sujetó la cara mientras le decía «que linda sos, podemos ser amiguitos e ir a jugar a mi casa”. La menor le contó a su madre que miró asustada al profesor y como estaba con una compañerita, se retiró del aula junto a ella.
Por último, la mujer le preguntó si había alguna persona mayor que hubiera escuchado eso, a lo que la niña respondió que estaba presente una maestra, y que estaba con otro compañero que también escuchó lo que le dijo el profesor.
